SEMBRANDO MOSTAZAS

Al leer el titulo de este newsletter, pensaras en la tradicional y cotidiana historia de la semilla de mostaza en la biblia, cuyo fondo es el principio de aprender a esperar. Quiero decirte que en este caso no es así y que todo empezó hace un poco mas de 5 años mientras preparaba todo para presentar uno de los proyectos que definiría mi futuro en el largo plazo.

Recuerdo estar sentado en la mesa del comedor en la casa de mis padres, haciendo planos e intentando formular una pregunta y un problema, que hiciera de mi tarea del momento, una idea capaz de presentarse con sentido, como mi un proyecto de vida en la clase que llevaba su mismo nombre.

Con el pasar de las horas, la tarde llegar a su fin, acumular papeles y archivos con datos inútiles; una tarea aparentemente sencilla y con un bajo nivel de complejidad, empezaba a convertirse en una pesadilla y la fuente de sentimientos frustración, vino a mi mente lo que parecía inconcebible para mi condición, sin mas dinero que el necesario para una semana de estudio, lleno de juventud y en una familia de clase media, en una situación económica poco favorable. Era la idea de construir un emporio de empresas dispuestas a crear negocios con propósito y principios cristianos, dispuestas a servir a la comunidad, honrando a Dios en cada paso y con cada labor.

Una lluvia de ideas y conclusiones, calificadas como irreales e inconcebibles para el momento por cualquier persona del común, porque combinaban lo imposible con lo inconcebible, la idea de iniciar un emporio sin dinero con la idea de dedicarlo a Dios y sostenerlo bajo unos principios evangélicos y no religiosos, dos ideas tan controversiales e inquietantes, que explicarlas en ese preciso momento, equivalían cientos de palabras de rechazo y critica.

Mis caminos y mis pensamientos son más altos que los de ustedes;
¡más altos que los cielos sobre la tierra!
Isaías 55:9

Decidido a escribir mis ideas y defenderlas a pesar de la irrealidad que significaban, en búsqueda de un reto, decidí agrupar aquellas ideas en una presentación y exponerlas a mi alrededor cercano, para escuchar sus criticas, comentarios y preguntas, para con ello conocer cuales serian mis argumentos para próximas ocasiones, cuales eran las ideas sobre las cuales debía formar mis fundamentos y cuales era los vacíos que seria necesario llenar para pensar en una realidad en los años venideros.

Divagando entre ideas, la mejor comparación y los mejores calificativos que mejor describirían la situación en la que para el momento me encontraba, serian los calificativos de iluso o soñador que definieron años atrás, a el escritor y director de la película de cine “back in the future”, que hoy 30 años después de su estreno en cartelera, aun siguen tomando forma.

Buscando argumentos para mi definir la que era mi situación, recuerdo haber encontrado en lo tradicional de los dichos cotidianos, mi fuente de animo e inspiración, la comparación de una semilla de mostaza y una planta de mostaza, fue entender que de la mas pequeña de las semillas puede crecer la mas grande de las plantas, tan grande como el mas frondoso de los arboles, con suficiente estructura como para soportar a cientos de las aves que habían podido ser su depredador en un principio.

¿A qué compararemos el reino de Dios, o con qué parábola lo describiremos? {Es} como un grano de mostaza, el cual, cuando se siembra en la tierra, aunque es más pequeño que todas las semillas que hay en la tierra, sin embargo, cuando es sembrado, crece y llega a ser más grande que todas las hortalizas y echa grandes ramas, tanto que LAS AVES DEL CIELO pueden ANIDAR BAJO SU SOMBRA. Marcos 4:30-32

Símil que hacia mis ojos brillar sin explicación y que hoy años después me ayuda a entender el como incluso de lo mas pequeño, Dios con mi compromiso y fe, puede formar tanto como para hospedar con admiración ha aquellos que un día fueron las fuentes de desanimo que pudieron hacerme caer.

Con esto quiero animarte a ti, que pasas por una situación de sueños y continuo desprecio, a que confíes en que aquel que un día me enseño a pensar en lo imposible, que puede estar hoy susurrando a tu oído con un llamado y un propósito de vida para ti, tan grande como 1000 a 1 en las veces que jamás lo habías pensado, pide por discernimiento y veras a Dios hacer cosas que jamás pensaste, posibles en tu vida….. A decirte que hoy mi incapacidad en combinación de mi fe a resultado en viajes a cientos de países, en emporio en formación y en ideas, hoy empresas en curso de ejecución.

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