Buscando una explicación a él porque vivía de una forma y no de otra, a él porque había decidido cambiar mi vida por completo, a él porque había decidido buscar una nueva definición de éxito, de familia, de satisfacción y de carrera. Buscando argumentos para poder comprender lo que hacía, para encontrar una explicación lógica a todo lo que hacía y a todo cuanto hacía. Me encontré buscando una paz, que solo había sentido un par de veces en mi vida, en momentos en los que todo para mi estaba cerca a mi punto cero, a mi punto de quiebra, a un punto en donde no todo en mis fuerzas estaría perdido y en donde solo seria para mi válido una solución real, una solución que me diera una plenitud.
El poder de Dios infunde temor; él hace la paz en las alturas de los cielos Job 25:2.
Intentando darle la vuelta a mi situación, entender las 2 perspectivas o escenarios posibles para mi, los 2 extremos, el bueno y el malo. Intentando encontrar el que seria de mi si continuaba de esta forma o si lo hubiera hecho diferente o si no lo hubiera hecho . Habiendo cambiado mi estatus profesional de Gerente de varios países, con potestad y cierto nivel de decisión a un estudiante en un país extranjero, en donde no tenía mayor oportunidad que estudiar o esperar por un milagro.
Caí en depresión, caí en largas y pesadas tardes, en donde mi cabeza no hacía más que devaluar lo que había hecho por la simple razón de que lógicamente nada tenía razón o congruencia. Llevé mi estado de ánimo al extremo de la incapacidad y a crearme la necesidad de buscar una salida, que en medio toda mi incapacidad luciera como un bote de rescate.
En mi búsqueda terminé cansado de ser aceptado y tener que negarme a una oportunidad, por el hecho de que no era suficiente o rozaba con los límites legales. En mi búsqueda termine sentado en un cuarto pidiendo a Dios, por algo diferente, pidiendo a Dios por una realidad en mi vida, en donde él tuviera participación, donde no solo me ayudara, si no en donde se me presentara como solo él sabe, con un milagro. Porque yo en mi capacidad estaba vencido y listo para ser declarado como un fracaso.
El Señor dará fortaleza a su pueblo; el Señor bendecirá a su pueblo con paz. Salmos 29:11.
Una realidad diferente a la que hubiera jamás pensado, me llevó a encontrar paz únicamente en caminar, en orar, en leer la biblia y en buscar a Dios. En dirigirme a él deseoso de encontrar el padre que aún no conocía del todo, en crear un interés enorme en querer conocer el cómo, el porqué y el tamaño de su grandeza. En buscarlo en cada momento del día, en dirigirme a él para que inclusive en el momento más inoportuno me mirara, en reconocer que en definitiva, sólo a través de él tendría salida, porque no había ninguna otra lógica que me pudiera conducir de tal profundidad a algo bueno, a algo tan bueno como los sueños que no había ni siquiera tenido.
Un padre eterno y todopoderoso, que me ama y que hoy te invito a que conozcas, a que pruebes mi escritura y a que la lleves a tu vida personal, te cambiará por completo y te hará vivir una paz que aun no logro describir o valorar.
